Máscaras y personas
Finalmente tengo un tiempo para escribir un par de ideas en torno a la película del Joker. Lo había querido hacer hace algún tiempo, pero primero quise ver la reacción del público y que lectura había sobre esta.
Para empezar diría que no estés dispuesto a ver una película de súper héroes, esto es más parecido a un thriller psicológico que otra cosa.
Así mismo doy por hecho que ya la mayoría 🙂 la habrá visto, porque indudablemente este texto tendrá spoilers en el camino.
Leí excelentes reviews donde se hablaba de la naturaleza psicópata de Arthur (Joker) y de cómo se fue formando este terrible enmascarado.
Creo que como en todo, existen diferentes niveles de comprensión, un ejemplo evidente puede ser la poesía o la música que nos puede llevar a explorar profundidades desconocidas en nuestro mundo vigil o el mismo acto de escribir, que puede ser una buena manera de articular y conceptualizar pensamientos, algo que personalmente siempre me ha sido terapéutico.
No pude evitar maravillarme con la forma tan lúcida de poner en acción el personaje del Joker, como el manejo de imagen y color impecables, casi como la genialidad del Batman de Nolan, arquetipos fundamentales en nuestra estructura cognitiva. Si bien Batman nos cuenta el viaje del héroe, este patrón narrativo del hombre que sacrifica su condición humana por algo más grande que él, como lo explica Campbell, ¿que nos cuenta el Joker? ¿qué es el Joker para nosotros? El villano, el malvado, la antítesis del bien, toda esa representación del mal encarnado. ¿Pero qué pasa con esta nueva narrativa de Phillips que expone ese nacimiento de dicho mal encarnado?
Vemos un Arthur evidentemente sobre adaptado, triste, asistiendo a terapia, sin un lugar en la sociedad, evidentemente deprimido –representado por los colores azules que se utilizan en esta parte o su saco café marrón que nos refuerza ese tono de enfermedad del personaje –sin lugar a dudas de inmediato, comienzo a empatizar con él, pero empatizar no significa justificar, aquí me gustaría citar la frase de Zizek al respecto -el joker encarna la verdad que altera un orden social de mentiras. Si la gente supiera cuan corrupto es el sistema legal, todo colapsaría-.
Es interesante que por ejemplo el PTSD muchas veces se desarrolla en personas particularmente ingenuas, lo que sugiere que, si experimentan algo fuera de su marco de pensamiento, generalmente malo, su manera incompleta de ver al mundo los puede dejar devastados, y es aquí donde podemos ir delineando la psiquis de Arthur, él se ve a sí mismo como una persona buena, con una particular personalidad complaciente, que vive a la sombra de su madre, una madre que por los detalles de la narrativa, es aparentemente narcisista, y nunca le dio chance a desarrollar habilidades para su independencia y establecerse en el mundo, es evidente que su estado emocional es responsabilidad de Arthur, lo que podemos inferir que ella siempre ignoró las necesidades de su hijo, uno de los tantos abusos que sufrió “happy” como ella paradójicamente lo llama.
“Mi madre siempre me dice que sonría y ponga una cara feliz. Ella me dijo que tenía un propósito: traer risas y alegría al mundo.”
Entonces vemos a un hombre como de 40 años incapaz de ser asertivo en el mundo, es un nadie, débil, no toma decisiones por miedo a dejar de ser quien cree es, el bueno de su película, de hecho, tiene un propósito alto, que es llevar felicidad a la gente en un mundo en decadencia, y al hacer esto surge el tema principal de la narrativa, La Sombra.
Según Carl Jung el arquetipo de la sombra es el lado oscuro de nuestra personalidad, aspectos reprimidos, ocultos. Es muy común que nos percibamos o aparentemos ser personas buenas, pero en nuestro interior pueden existir rasgos hostiles, rabia, odio, envidia, etc.
Aquí es donde de forma magistral se expone este concepto, empezando por la máscara que usa Fleck, esa manera de presentarnos al mundo muchas veces engañando y engañándonos, es decir, adoptamos formas de ser frente a las circunstancias, ese falso YO que no permite que se develen nuestros aspectos inconscientes, me viene a la mente una de esas escenas tristes de Arthur como la que después de pintarse su máscara se obliga a reírse y deja ver su represión interna dando esbozos de que algo intenta salir, como la representación magnifica de su condición en la que no puede parar de reírse, si bien esto existe en la vida fuera de la película, ese elemento contextualizado a la narrativa de Arthur nos muestra pequeños desfogues incontrolables de aquella sombra, que cuanto más es reprimida más densa puede llegar a ser.
Gran parte de lo que somos está en la oscuridad del inconsciente, y si lo reprimimos o suprimimos literalmente estamos matando una parte de nosotros mismos, llegando a ser muy perjudicial.
“Durante toda mi vida, no sabía si realmente existía. Pero yo sí, y la gente comienza a darse cuenta.” En esta cita, está una clara manifestación de su sombra, pero existe una escena clarísima de esto cuando acaba matando a los 3 burgueses, es el momento en que Arthur conoce el poder, descubre que es capaz de tomar decisiones que acaben con su dolor, ha pasado toda su vida ignorando sus necesidades y ocultando su oscuridad, que esta explota, el corre por un túnel amplio y a contra luz en primer plano se ve solo su sombra gigantesca corriendo – aquí el tratamiento de la imagen es perfecto ya que remonta el amarillo naranja, que en diferentes escenas ya salía en pequeños detalles para representar el peligro latente, para aquí mostrarnos que ese peligro ya está fuera de control, de hecho su chaleco es de ese color.
El golpe final de su trama es cuando se revela la verdad de su madre, entonces la vida pasa a ser una comedia, como decía Camus “ la vida es absurda” cuestionando la validez de lo bueno y lo malo, concluyendo que el sistema moral es ridículo y el ahora tiene el poder de decidir que es bueno o malo a sus ojos, “Maté a esos tipos porque eran horribles. Todos son horribles en estos días. Es suficiente para volver loco a cualquiera.” Joker abraza lo absurdo y encuentra su liberación en el poder corrupto.
En conclusión, el encuentra todos los elementos motivadores para convertirse en lo que es “el Joker”
“¿Has visto cómo es allá afuera, Murray? ¿Alguna vez dejas el estudio? Todos solo gritan y gritan el uno al otro. Ya nadie es civilizado. Nadie piensa cómo es ser el otro chico. ¿Crees que hombres como Thomas Wayne alguna vez piensan lo que es ser alguien como yo? ¿Ser alguien más que ellos mismos? Ellos no. ¡Piensan que nos sentaremos allí y lo tomaremos todo, como buenos niños! ¡Que no seremos hombres lobo y nos volveremos locos!”
Está por demás decir que por el hecho de reprimir nuestra sombra vayamos a ser asesinos despiadados, no!, lo que trato de exponer en mi lectura de la película es ese arquetipo con el que todos contamos y no lo conocemos y puede ser que muchas veces actuemos desde ahí, acechando desde la oscuridad con comportamientos indeseables, primitivos, viscerales, incomodos, llenos de miedos, egoísmos decisiones no tomadas, sueños no cumplidos, y que al contemplarlos, conocerlos e integrarlos en nuestra personalidad consciente podremos vitalizar e iluminar nuestra existencia. Dicen que lo que condenas es simplemente un acto de proyección de tu sombra, hacia otros.
Así es que observarnos, contemplar nuestras sombras, como dicen en el budismo nuestras partes menos afortunadas, sin juicio y reprensión iniciará un paulatino proceso de descubrimiento que nos llevará a una vida plena y llena de significado.
“La noche esta tan preciosa como el día” Marrion Woodman.
Intersubjetivo 